Aumentar la productividad del equipo de meseros, en todos sus aspectos, debe ser una de las prioridades de todo restaurante. Al asegurarte que tu personal cuenta con las condiciones y la motivación adecuada para desempeñar su labor, estás abriéndote camino al éxito en el mundo culinario.
Para ayudarte, hemos preparado algunos consejos para ayudarte a sacar el mayor provecho al tiempo y esfuerzo de tus meseros.
Planifica las rutas de tus meseros
El trabajo del mesero es uno de los más dinámicos de cualquier restaurante. Deben estar atentos a lo que sucede en las mesas y actuar con eficiencia y precisión para hacer de la velada del comensal algo especial. Es por ello que una de los cambios más importantes, económicos y rápidos que puedes para aumentar la productividad de tu equipo es organizar las mesas tomando en cuenta su labor.
Una buena distribución del espacio hace las cosas más fáciles para tus clientes y tus empleados. Asegúrate de mantener una distancia cómoda entre las mesas y define las áreas de trabajo de cada mesero para evitar conflictos o accidentes.
Establece tareas y responsabilidades
Aunque su principal función es la atención y las ventas, existe una gran cantidad de tareas que el equipo de meseros puede hacer en el restaurante. Dedica un momento del día para establecer con claridad las funciones del equipo y así evitar conflictos o atrasos en el servicio. Ser parte de una estructura definida ayuda a desarrollar la coordinación y cooperación entre los diferentes departamentos de tu restaurante, fomenta la comunicación y proyecta un aura de profesionalismo que impacta en los comensales.
Establecer tareas para el tiempo muerto, es decir, mientras hay pocos o cero clientes, también ayudan a tus meseros a mantener el ritmo de trabajo y la actitud a lo largo del día.
Involucra a tu equipo con tu visión
Debido a sus funciones, los meseros deben ser los primeros en comprender lo que realmente buscas transmitir en tu negocio. Desde los valores hasta la temática del local, un mesero trabaja mejor cuando comprende su ambiente de trabajo. Son ellos quienes hablarán con los comensales tan pronto entren por la puerta, por lo que trabajan mejor mientras más sepan sobre el restaurante y más se comprometan con estas ideas.
Organiza charlas o talleres a través de los cuales puedas enseñar y cautivar a tu equipo para que sean más que simples empleados. Los comensales notarán la diferencia.
Invierte tiempo y dinero en capacitación
Un buen mesero debe transmitir seguridad a tus clientes, y esto solo se logra por medio de la preparación constante. Desde cómo saludar correctamente hasta la forma más eficiente de transportar los platos, contar con un personal capacitado y experimentado es muestra de profesionalismo y un compromiso por ofrecer el mejor servicio.
Recuerda que todos nos sentimos mejor en un trabajo donde crecemos como personas y profesionales. La diferencia entre un mesero motivado y uno que no lo está es evidente e influye en cada aspecto de su trato con el público.
Adopta la tecnología en tu restaurante
El uso de la tecnología hace sentir cómodos a los comensales y aumenta la precisión de tu restaurante en general. Para los meseros, contar con apoyo digital, como tablets para realizar órdenes, significan tener que dedicar menos tiempo a cada mesa y menos errores al recibir los pedidos. Además, ya que el pedido es recibido directamente en la cocina, tus meseros ahorran un viaje por mesa, lo que los deja listos para realizar otras tareas de inmediato.
Muchas de estas herramientas te permiten configurar sugerencias de bebidas o acompañamiento entre los pedidos, lo que aliviará un poco la necesidad de los meseros de aprender todo el menú. Sin embargo, sigue siendo recomendable que tu equipo de meseros conozca de primera mano tu oferta de platillos y esté al tanto de lo que sucede en la cocina.